domingo, 16 de mayo de 2010

WNBA


Porque el baloncesto no para en verano, porque éste ofrece una segunda oportunidad a toda una ex campeona olímpica de atletismo, o porque puedes revivir un duelo Malone-Olajuwon a través de sus hijas. Hay muchos motivos para seguir la WNBA. Aquí te presentamos 10, elige el tuyo


La WNBA comienza y con ella el espectáculo del baloncesto femenino (Foto Rick Sakoda)
A mitad camino entre el final de temporada de las principales competiciones deportivas y el comienzo de las vacaciones estivales, la WNBA echa a rodar una nueva temporada. Lo hace, como cada año (y ya van 14), con cambios importantes en su configuración.

Para empezar, desapareció Sacramento Monarchs, una de las franquicias históricas que puede presumir de tener un título de WNBA, mientras que el equipo de las Shock hizo las maletas para viajar de Detroit a Tulsa. La crisis económica se cebó con la ciudad del motor y tras un duro año deportivo comienzan una nueva vida en una ciudad lejana a los grandes mercados deportivos del país, pero con la ilusión de acoger el mayor evento deportivo del verano.

Porque sí, en las tardes y noches de verano la WNBA se hace un hueco entre los aficionados al deporte de la canasta con un juego donde cambian equipos y jugadoras pero donde permanecen los ideales con los que fue concebida: emoción y espectacularidad.

Y es que ahora mismo es una locura pensar qué equipo puede ganar la WNBA, los favoritos no sirven de anda en una competición donde ningún equipo repite título desde que lo hicieran las Sparks en el 2001-2002. Las últimas dos finales han visto a cuatro equipos distintos y con tanta igualdad es difícil pensar dónde puede estar la sorpresa.

Lo que no nos sorprenderá es ver mates esta temporada. Atrás quedó el tiempo donde los escépticos del baloncesto femenino se escudaban en la inferioridad física de las mujeres para criticar el espectáculo del mismo. En pleno siglo XXI asistimos a la eclosión de una nueva generación que aúna el talento físico con unas aptitudes físicas impensables hasta hace unos años. Candace Parker lidera una hornada de talentosas jugadoras como Sylvia Fowles, Angel McCoughtry, o Candice Dupree. Es irreal pensar que son dos baloncesto iguales, pero ahí mismo radica la belleza de la WNBA…



1.-¿Repetirá título Phoenix Mercury?

La última vez que nos hicimos está pregunta, hubo un rotundo no por respuesta. Tras el título en 2007, la temporada siguiente fue un desastre con la lesión de Diana Taurasi y el equipo no llegó ni a clasificarse para los Playoffs.

Ahora el equipo vive una situación compleja pues el dúo dinámico que formaban Cappie Pondexter y Diana Taurasi se ha roto después de mucho tiempo y muchos títulos. La escolta quería explorar nuevas facetas de su vida y propició un triple traspaso por el que ha llegado a Arizona Candice Dupree.

Corey Gaines está buscando nuevas alternativas a su quinteto y su estilo de juego, para frenar la velocidad de su ataque y buscar una superioridad física con Penny Taylor, Tangela Smith y la propia Dupree. Nuevas formulas en las Mercury que buscan el mismo resultado… Sea como sea hay algo que no cambia en Phoenix, la reina del desierto seguirá siendo Diana Taurasi.


2.- La lucha por ser la mejor


En Valencia no tienen dudas, Diana Taurasi es la mejor del mundo. Sólo basta con ver su última Final Four de la Euroliga para comprobarlo, pero al otro lado del charco su reinado quiere ser puesto en tela de juicio por Candace Parker quien vive su primera temporada completa tras ser madre y seguro que volverá a brillar como lo hiciera en su año de rookie tras ganar en Europa la Copa y la liga en Rusia.

Ellas dos han sido las últimas MVP de la liga, pero por si acaso Becky Hammon, Sylvia Fowles, Sue Bird o Cappie Pondexter prometen ser duras competidoras en una temporada llena de incertidumbres colectivas, pero también individuales.


3.-La nueva vida de las Sparks sin Lisa Leslie


El año I sin Lisa Leslie no será fácil. Desde que se creó la franquicia la legendaria pívot fue su más reconocida estrella y ahora ha dejado huérfano a las Sparks. “Ella ha sido una gran inspiración para todas. No sólo ha sido la mejor jugadora de la historia sino que con su esfuerzo y entrega era todo un ejemplo de la que todas hemos aprendido”, aseguraba Candace Parke al preguntarle por su ex compañera.

Ahora el equipo descansará sobre las espaldas de la mayor promesa del baloncesto americano, pero para que Parker no se sienta abrumada por la responsabilidad (¿podría sentirse?) dos veteranas como Delisha Milton Jones y Tina Thompson le ayudarán en la difícil misión de devolver los días de gloria a Los Angeles.


4.- Los Knicks a copiar la fórmula de las Libery


A estas alturas de verano Donnie Walsh bien podría estar tomando apuntes de su homólogo en New York Liberty y fijarse en lo bien que se ha movido la franquicia de la Gran Manzana en la postemporada. Si los Knicks buscan en la NBA a una superestrella, las Liberty se han hecho con una top 5 de la liga. Porque discutir quién es la mejor es difícil, fácil resulta decir que Cappie Pondexter es una de las mejores de la liga.

La escolta decidió cambiar el desierto de Arizona por las luces de neón de Broadway y buscar nuevos alicientes en una carrera meteórica donde ya hay espacio para dos títulos de WNBA y una nominación como MVP de las finales.

Además la Liberty le han dado un lavado de cara al equipo y sólo dos jugadores permanecen del quinteto titular del año pasado. Dos All Star como Nicole Powell (ex Monarchs) y la veterana Taj McWilliams Franklin serán escuderas de Pondexter. Si la fórmula funciona, Walsh ya sabrá en que espejo mirar.


5.-El último baile para Hammon y Jackson


Si hay dos equipos veteranos que buscan una última oportunidad esos son San Antonio Silver Stars y Seattle Storm. Las Silver Stars han estado muy cerca del título en las dos últimas temporadas pero el tiempo no pasa en vano y su máxima estrella, Becky Hammon, apura sus últimas oportunidades. Ella y Sophia Young lideran un equipo donde la joven Jayne Appel espera ser la referencia interior que tanto han echado de menos.

En Seattle todos se alegran con el regreso de Lauren Jackson y es que la estrella está de regreso tras su retiro espiritual en Australia. En su casa ha descansado y ahora toca volver a trabajo junto a otras dos veteranas como Swin Cash (quien ha vivido una exótica aventura asiática) y Sue Bird. Son muy veteranas y cada año flojean con forme se acerca el final del año, pero si no tienen lesiones y Lyttle ayuda, todo es posible.


6.-Tulsa: La ciudad de las segundas oportunidades


Detroit vio como la crisis cerró muchas empresas y se llevó a su equipo femenino. Pasaron los años de gloria donde celebraban títulos y ahora toca la reconstrucción de la franquicia en Tulsa una ciudad de difícil ubicación en el mapa y que está lejos de los mercados potentes del país.

Pero si para las Shock es una segunda oportunidad, algo más parece ser lo que está puntos de abordar Marion Jones. Casi podríamos hablar de una segunda vida donde intentará olvidar sus días de cárcel y redimirse sus pecados con un deporte donde ya fue campeón universitaria.



7.-Nuria, una de las nuestras


Después de mucho tiempo sin noticias de ella, Nuria sigue su viaje baloncestístico y comenzará su segunda etapa en WNBA con las Minnesota Lynx. Nuria prueba la aventura en un equipo joven y ambicioso que persigue sus primeros Playoffs.

En Minnesota deberá dar relevos de claridad a la indiscutible titular Lindsay Whalen, pero su talento seguro que le ofrecerá oportunidades ya que el juego de la WNBA se ajusta muy bien a sus características.


8.-El record de los 50


“Si un día me siento inspirada y la bola quiere entrar, todo es posible”. Son palabras de Diana Taurasi, la mujer que ostenta el récord de anotación en un partido de WNBA junto a Deanna Nolan y Lauren Jackson. Las tres alcanzaron los 47 puntos y las tres quiere convertirse en la primera jugadora en romper la barrera de los 50 puntos ¿lo conseguirán este año?


9.- El futuro es ahora

El siglo XXI llegó a la WNBA con Candace Parker y Sylvia Fowles, continuó el año pasado con Angel McCoughtry y en el 2010 Tina Charles toma el testigo como número del pasado Draft. Fue la líder del histórico equipo de UConn que terminó el año invicto y da el salto al profesionalismo ofreciendo muy buenas sensaciones.


10.-La herencia genética

Si ya conocíamos la relación de Candace Parker con la NBA o cómo se las gastaba la hija de Karl Malone, este año la WNBA nos permitirá descubrir cómo juega la hija de Hakeem Olajuwon.

Como su padre, Abi Olajuwon juega de pívot, pero hasta ahí pueden llegar las similitudes con su padre, ya que su juego no se asemeja mucho al de Hakeem. El liviano pívot de los Rockets basaba su juego en un increíble juego de pies y una excelente mano cerca de canasta. En Abi eso no lo encontramos pero si mucha fuerza, músculo y contundencia debajo de los tableros.



http://www.acb.com/redaccion.php?id=67373
http://www.wnba.com/

No hay comentarios:

Publicar un comentario